Ucrania en el corazón de Montreal

Desde el inicio de la guerra mi mente ha ido al barrio Ucranio de Montreal. Un sitio que visitaba con frecuencia, antes, por motivos personales. Ahora, ese barrio ha cobrado un sentido más profundo. Es lo más cercano que tenemos en la ciudad al drama que está aconteciendo ante los ojos del mundo. Por ello, no dudé un instante en ir y encontrar a los habitantes del barrio Ucranio, oírlos y ver cómo están viviendo la invasión a su país. De ahí deriva este artículo, redactado para la revista Hispanophone, que tengo el gusto de compartir aquí con ustedes.

Un parque llamado Lhasa de Sela

Con motivo del Festival literario de Montreal, Blue Metropolis, tuve el honor de grabar una narración sobre la legendaria cantante mexicana-canadiense Lhasa de Sela. Su vida fue un viaje constante entre fronteras, tal y como la nuestra, la de los emigrantes que vamos de un sitio a otro. Cuando pensamos llegar al fin del camino, siempre hay un tren que nos lleva algún sitio. Como parte del evento: «Paseos literarios», aquí lo comparto. Ojala´á lo disfruten:

Entrevista para la Secretaría de Relaciones Exteriores, México

A veces no sé ni cómo llego, ni cómo vine. Observo hacia atrás e intento observar todo lo que me ha llevado a escribir y la manera, muchas veces fortuita, de encontrarme con la creación. En esta entrevista algo de toda esa vida, de lo que he escrito, de quien he sido a través del viaje constante de México a Canadá:

De México a Montreal, Ángel Mota Berriozábal: https://www.youtube.com/watch?v=A5Ywvva8k6Q

El último libro de Babel, tercera parte

La crisis del libro es un hecho,  a pesar de la gran presencia de la literatura en internet. Esta crisis se refleja en la desaparición de libros de fondo y de autores literarios complejos, o por lo menos una reducción severa de venta y lectura de sus obras, en las librerías de Montreal y Canadá. En esta tercera parte, de la serie de crónicas que he escrito al respecto para la revista Hispanophone, medito sobre ¿cuál es la implicación del cambio de lo impreso a lo digital?, ¿de la transformación del espacio de la librería o biblioteca tradicional al espacio virtual? ¿Cuál es la implicación de todo esto en nuestra noción de objeto y de espacio?, y más aún de la memoria. Hasta ahora la serie ha suscitado muchas emociones. Lo cual implica que es un tema apasionante que nos toca a todos los que amamos las letras y el saber. Como el tema lo pide, y deseo profundizar más, dejo la crónica y la entrevista para dar lugar a un ensayo, en donde elaboro algunas de mis reflexiones. Las cuales comparto aquí con ustedes:

El último libro de Babel, parte 3

Historias de Montreal

La migración es una vida y cuando se observa de lejos, estando dentro, la memoria te juega la treta de contarte historias. De esta forma, escribí para el libro Historias de Montreal, un cuento de momentos de mi vida. Momentos en que llegué a vivir con unos artistas en un loft: antigua maquiladora, donde mujeres francocanadienses y luego inmigrantes desgarraron su tiempo y ojos por unos cuantos dólares. Yo viví ahí y viví el abuso de autoridad y de poder de un sólo hombre, un pintor,  al tiempo que aprendí a conocer el cine y mundo cosmopolita de Montreal. Sobre eso, y la idea de libertad, fraternidad e igualdad es mi cuento, al cual nombré: “La insoportable levedad de un pintor.”

Es un gran placer verlo en las páginas de un libro que logra reunir tantos autores de sumo talento. A la vez, resulta una ironía del tiempo y el sino  el hecho de que una de las cintas que más me marcó, viviendo en México, haya sido una de nombre: “Historias de Nueva York.” En la película, una de las tres historias, transcurre en un loft  de  artistas, como lo que yo viví y escribí después. Jamás pensé que la ficción se volviese realidad, mi realidad.

El último libro de Babel, segunda parte

Un tema tan apasionante y complejo como lo es la crisis de la literatura y el cierre paulatino y voraz de librerías en Canadá me ha llevado a escribir una serie de ensayos que publicaré paulatinamente, a modo de entregas. Una problemática en la que he venido reflexionando por mucho tiempo y que me deja con un triste sabor de boca. Estamos en un período de transición y ello quise plasmarlo. De esta forma, en la segunda parte de esta serie, continuo con la entrevista que hice al gran librero Francisco Hermosín, de la librería las Américas, en Montreal. Centro literario y de la lengua hispana más importante de Canadá. Sus puntos de vista sobre las modalidades de la crisis y sus razones son de una eficacia y profundidad asombrosas. Si bien en nuestra conversación nos referimos al fenómeno literario de Canadá, me parece que el dilema se asemeja a lo que está ocurriendo en el mundo entero. Comparto aquí, con gran placer, esta segunda entrega que publicó la revista Hispanophone, de la Universidad de Montreal:

El último libro de Babel (parte 2)

La metamorfosis de Ulises: un viaje a la poética de Omar Alexis

Escribir sobre mi tiempo es una necesidad que me he creado para dejar historia y testimonio de la vida en las artes y letras de la comunidad hispana de Montreal. Me interesa contar los eventos, autores y circunstancias de las que he sido testigo y me ha tocado vivir. De ahí que ahora redacté un ensayo sobre un poeta muy sobresaliente, de las letras hispano-canadienses: Omar Alexis. Un ensayo que reflexiona no sólo sobre su poesía, sino sobre la vida detrás de los versos, sobre la labor de la metáfora como modo de expresar los diferentes yo que habitan al autor. Omar es un Ulises viajero nocturno que toma diversos rostros en su experiencia y en su poesía; del Minotauro a Teseo, de Ulises al hombre que ama. Su lenguaje es un enriquecimiento a la poesía. Dejo en sus manos el texto que me publicó la revista de la Universidad de Montreal; Hispanophone.

La metamorfosis de Ulises: un viaje a la poética de Omar Alexis

Mi nuevo ensayo, sobre una interesante novela

A veces, la lectura de una novela no nos puede dejar indiferentes y por eso deseamos dialogar con ella, comunicar con el autor, porque lo plasmado se ha adentrado en nuestros sentidos, lo que en sí nos dicta un deseo de seguir conociendo la historia y los personajes de lo escrito, lo que está detrás y lo que tal vez pueda venir después de la obra. De ahí que me nació la necesidad de escribir un ensayo sobre la novela Rojo, amarillo y verde, del escritor boliviano-canadiense, Alejandro Saravia. Una novela sobre el deseo de un ex-militar boliviano, exiliado en Montreal de escribir y expiar sus memorias. De ahí que la novela sea un relato de  memorias, de diversas maneras de recordar, cuando la memoria nos persigue por lo vivido en el pasado y es historia. Una memoria que se va transformando con el cotidiano y el encuentro amoroso. La novela de Saravia cuestiona la idea de Estado Nación, de identidad nacional, para proponer alternativas culturales y sociales, y el todo escrito con gran acierto y un mucho de humor. Mi ensayo es, con esto, una ficción sobre una ficción, algo que viví unido a algo que he leído. Aquí el ensayo completo, para los que deseen leerlo. Publicado por la revista Hispanophone, de Montreal:

Una kurda llamada Bolivia y otras vejaciones de Alejandro Saravia

 

y la rueca del tiempo llevó mi libro a París

Cuando escribí el poemario: «Migajas de agua y ausencia» en la Petite Italie de Montreal, en torno al 1998, lo trabajé una y otra vez con el empeño de darle la mejor vida posible. Escribí así los versos con una experiencia amorosa en agonía y como memoria de momentos intensos de la relación de pareja, que desée perduracen a los estragos de los años. Al tiempo, quise expresar imágenes de la manera más original y musical posible. Esa intensidad, esos momentos efímeros de sensualidad y amor, tomaron entonces forma en versos y metáforas que desée vivas, que se movieran con placer y reflexión en lo complejo de mis sensaciones, y lo por lo mismo en las de los lectores. Fue así que intenté publicar el libro, sin ningún resultado, ni en español, ni en francés. Sin embargo, en lecturas en bares y cafés de Montreal, amigos escritores y gente de toda condición expresaban con ánimo su gusto y sumo aprecio de los poemas. No desistí entonces. Solo guardé el manuscrito en gaveta. Ahi permaneció por unos años. Como si los poemas se movieran solos entre los metales del archivero, entre la carpeta que había de sepultarlos, sin más futuro. Empero, ese viaje a Italia, que ya conté en un post anterior, les dio nueva vida. Crecieron en italiano esas metáforas al ser algunos traducidas y publicadas en Cosenza, Calabria, en el año 2002 y, tras un mítico viaje a Barcelona en el 2008, que también conté aquí, en otro post, otros versos se transformaron a la lengua de Gaudí. Aún, el poemario como tal siguió en el anonimato. Poemas sueltos fueron los que se esparcieron en distintas lenguas; inglés, francés, catalán e italiano, en varios países.  En gran parte esto sucedió gracias al video de Raimundo Morte. De esta forma, años después, en el 2017,  fruto de momentos de retrospectiva y deseos de sacar el libro antes de que se perdiese en el olvido, decidí intentar publicar, otra vez, el poemario, pero esta vez junto a otro: Un eco de tu voz. Otro libro que ni siquiera había intentado imprimir. Había publicado solo algunos de sus poemas en revistas en Montreal, Italia y Estados Unidos. De esta forma, para mi total sorpresa, ambos poemarios fueron recibidos en Francia con beneplácito. Ediciones l’Harmattan decidió publicar una versión bilingue de los dos poemarios, bajo el título: Un eco de tu voz. Sí, mis poemas, por fin serían publicados en español y en mi segunda lengua, el francés.

 

De esta forma, hace unos días visité otro sitio en ese viaje homérico que inició en 1998, año de escritura de los poemas. Sí, veinte años después de su creación, viajé a París para presentar el poemario. Ediciones l’Harmattan me invitó a presentar el libro en un espacio dedicado a lecturas y promoción de obras: L’Espace Harmattan.

 

Una librería en el corazón del Quartier latin. En el viaje de promoción recorrí  el famoso barrio republicano con los ojos bien abiertos en cada librería, santuario de la diversidad, del conocimient0, donde descubrí libros de África a Medio Oriente, América Latina a lo más nuevo de Europa. Sí, mis poemas escritos en uno de esos inviernos gélidos de Canadá, los que deseaba hacer perdurar en el tiempo, con su sensualidad y amor perdidos, los que habían viajado por todos sitios, desarmados, solos, ahora finalmente se volvían libro. El viaje a París fue c0mo ir a Itaca, el poemario es como Itaca; logrado veinte años después de su escritura y pérdida en el anonimato. No que París sea mi casa, mas, pensar que tantos poetas hispanos encontraron refugio ahí, como César Vallejo, Octavio Paz o Lautrémont, me hizo sentirme como en una ciudad conocida, ya surcada, donde tuve una mirada con sonrisa delgada a  mi pasado, a la juventud que creó los poemas. Con toda su crueldad, con toda su mofa, la arrogancia y su belleza, no ha sido acaso París la casa y cuna de escritores expatriados de todos sitios?, y cuyas casas y parques han albergado pinturas, esculturas, libros que, sin ese París que ríe, sin ese París de soledad, mas de letras y artes, nunca hubieran nacido, nunca hubieran encontrado su Itaca? Pequeño, efímero, mi poemario, espero, ya hace parte de este laberinto, universo de obras en esa ciudad de techos azules, los del tiempo, o por lo menos ya tienen vida en un libro que no depende más de mí. Han nacido en un barco que viajará por si solo.